En la búsqueda de una tez radiante y juvenil, el acné puede surgir como un desafío inesperado, incluso para aquellos que han dejado atrás la tumultuosa adolescencia. Si te encuentras enfrentando este problema en tu tercera década de vida, no estás solo. El acné en adultos es más común de lo que se suele creer, y entender sus causas y tratamientos adecuados es esencial para recuperar una piel saludable y la confianza en uno mismo.

 

Causas del acné en adultos

 

El acné a los 30 años es muy habitual, afectando aproximadamente al 20% de las mujeres y al 5% de los hombres.

 

Las causas del acné en esta edad son diversas y pueden incluir:

 

Cambios hormonales: Las fluctuaciones hormonales durante el ciclo menstrual, el embarazo y otras etapas de la vida pueden aumentar el riesgo de acné.

Estrés: El estrés puede aumentar la producción de sebo, una sustancia oleosa que puede obstruir los poros y contribuir al acné.

Genética: La predisposición genética al acné puede aumentar el riesgo de desarrollarlo a cualquier edad.

Cosméticos: Algunos productos cosméticos pueden obstruir los poros y contribuir al acné.

Medicamentos: Algunos medicamentos, como los corticosteroides, pueden causar acné como efecto secundario.

Dieta: Aunque no hay evidencia concluyente, algunos estudios sugieren que ciertos alimentos, como los lácteos o los alimentos con alto contenido de azúcar, pueden contribuir al acné en algunas personas.

 

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Hábitos para prevenir o contrarrestar los efectos del acné

 

Adoptar ciertos hábitos puede ayudar a controlar el acné y promover una piel más saludable en general. Algunas recomendaciones incluyen:

 

  1. Mantener una dieta equilibrada: Consumir una dieta rica en frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, lo que a su vez puede tener un impacto positivo en la piel.

 

  1. Beber suficiente agua: Mantenerse bien hidratado es esencial para una piel sana. Beber al menos ocho vasos de agua al día puede ayudar a eliminar toxinas del cuerpo y mantener la piel hidratada desde dentro hacia afuera.

 

  1. Reducir el estrés: Incorporar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o simplemente dar paseos al aire libre puede ayudar a reducir los niveles de estrés, lo que puede mejorar la salud de la piel.

 

  1. Lavar tu cara: La contaminación del ambiente también puede producir acné, es importante que laves tu cara con un limpiador suave al menos 2 veces al día para retirar impurezas y evitar poros obstruidos.

 

  1. Evitar productos comedogénicos: estos son productos cosméticos en cuyo composición se encuentran elementos que obstruyen los poros de tu piel como las parafinas, siliconas o vaselina.

 

Post acné: Tratamiento y prevención

 

El post acné se refiere a las marcas, cicatrices o hiperpigmentación que pueden quedar después de que los granos hayan sanado. Para evitar estas secuelas es importante nunca extirpar los granos con tus propias manos para evitar infecciones. Lo más recomendable es realizarte una limpieza facial, donde un profesional podrá realizar extracciones de manera controlada.

Aun así, puedes presentar secuelas, por lo que es importante mantener una rutina de cuidado de la piel constante y utilizar ingredientes como la vitamina C, el retinol o el ácido salicílico, que ayudan a reducir la apariencia de manchas oscuras y mejorar la textura de la piel.

 

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Tratamientos para el acné o post acné en adultos

 

La buena noticia es que existen varios tratamientos efectivos para combatir el acné o sus secuelas en adultos y restaurar la claridad de la piel. En la estética Cruz Merinero contamos con dos tratamientos esenciales para esta condición: el láser azul y el hydradeep.

 

Te los explicamos a continuación:

Hydradeep: es uno de los dispositivos más versátiles del mercado ya que cuenta con 5 cabezales para diferentes funciones. En específico, la paleta ultrasónica es ideal para remover células muertas de la piel mediante vibraciones de alta frecuencia.

Láser azul: tiene un efecto bactericida y puede eliminar la queratosis producida por el acné o por una piel grasa. La clave se encuentra en su limpieza profunda de modo vertical y no horizontal, como la mayoría de tratamientos que simplemente van arrastrando las bacterias y suciedad de nuestra piel.

 

En conclusión, el acné en la edad adulta puede ser frustrante, pero no es insuperable. Con la combinación adecuada de tratamientos y hábitos saludables, es posible restaurar la claridad y la vitalidad de la piel, permitiéndote lucir y sentirte lo mejor posible a cualquier edad.

 

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Recuerda que puedes asistir a nuestra clínica estética Cruz Merinero para recibir un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento personalizado que se ajuste a tus necesidades individuales.

 

¡Mantén la cabeza en alto y sigue cuidando tu piel con amor y dedicación!
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