Cómo cuidar la piel de la cara
Siempre se dice que la cara es el espejo del alma, por eso preservarla y cuidarla de todas las agresiones externas por las que pasa será una de las grandes inversiones a nivel de belleza y cuidado que vas a hacer a lo largo de los años para demostrar que estás radiante.
Piensa por ejemplo en verano por las situaciones extremas a las que se enfrenta: cambio radical de temperatura, sol, sudoración, viento, etc…
¿Qué hacer para que tu piel se resienta lo mínimo posible de las condiciones estivales y hacerla brillar?
En este artículo te vamos a hablar de cómo cuidar tu piel de la cara, que es la que finalmente más exponemos a los agentes externos tanto en verano como en invierno.
Así, vamos a ver:
- Factores que perjudican nuestra piel facial.
- Cómo cuidar la piel de la cara.
- Limpieza facial profesional.
Factores que perjudican nuestra piel facial
Hay muchos y muy diversos factores que pueden perjudicar la salud de nuestra piel facial y a cada uno de nosotros nos va a afectar de diferente manera. Es importante tomar consciencia de cuáles son esos factores individuales para evitarlos y/o mejorarlos en la medida de lo posible. Vamos a listar algunos de los más importantes:
- Exposición solar: la principal causa del fotoenvejecimiento es la exposición prolongada y repetida a la radiación UV del sol. Los rayos UVA y UVB dañan las fibras de colágeno y elastina en la piel, lo que provoca la pérdida de elasticidad, arrugas, manchas y otros signos de envejecimiento.
- Radiación Ultravioleta (UV): además de la exposición solar, otras fuentes de radiación UV, como las camas de bronceado, también pueden causar fotoenvejecimiento.
- Fototipos de piel: si tu tez es más clara quiere decir que tienes un fototipo de piel más propensa al fotoenvejecimiento, ya que tu piel tiene menos melanina, que es el pigmento protector de la piel y deberás protegerla más.
- Factor genético: tu predisposición genética puede influir en cómo tu piel responde a la exposición solar y en la rapidez con la que muestra signos de envejecimiento.
- Estilo de vida: factores como una mala alimentación, comidas copiosas o fumar pueden contribuir al fotoenvejecimiento al dañar el colágeno y aumentar la producción de radicales libres en la piel.
- Contaminación y estrés ambiental: estos lo controlas menos a nivel individual, pero has de saber que la contaminación atmosférica y otros factores ambientales pueden aumentar el estrés oxidativo en la piel, lo que acelera el proceso de envejecimiento.
- Hormonas: esto te afecta más si eres mujer. Los cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o la menopausia, pueden influir en la respuesta de la piel al sol y en la velocidad de aparición de los signos de fotoenvejecimiento.
- Protección solar o uso de bronceadores inadecuados: no usar protector solar o no aplicarlo regularmente, especialmente en áreas expuestas como el rostro, el cuello y las manos, aumenta la susceptibilidad al envejecimiento prematuro.
- Cuidado de la piel: la falta de cuidado adecuado, como no utilizar productos con antioxidantes o no mantener una rutina de limpieza y exfoliación, puede contribuir al daño causado por el sol o el viento.
10. Limpiezas faciales profesionales: hay poca consciencia de que tu piel necesita, al menos, una limpieza profunda facial al año para que pueda oxigenarse y regenerar sus células. De esto te hablamos en el último punto.
Cómo cuidar la piel de la cara
Este apartado es la contrapartida del anterior y en él te vamos a ar algunos tips de cómo mantener tu piel facial en su mejor estado y deslumbrar con una tez luminosa.
- Limpieza esencial: comienza y termina tu día con una limpieza suave pero efectiva. Limpia tu rostro por la mañana para eliminar las impurezas de la noche y por la noche para deshacerte del maquillaje y la suciedad acumulada durante el día.
- Hidratación diaria: aplica una crema hidratante que se adapte a tu tipo de piel después de limpiarla. Si tienes una piel grasa, las fórmulas ligeras son más recomendables para ti, mientras que si la tienes seca beneficiarse de una crema más rica. Si dudas sobre qué tipo es tu piel puedes consultarnos para hacerte un diagnóstico.
- Protección solar: no nos cansaremos de repetir que el sol es uno de los mayores enemigos de tu piel. Utiliza protector solar todos los días, incluso en días nublados. Un protector solar de amplio espectro con un SPF adecuado (al menos 30) protegerá tu piel de los daños causados por los rayos UV, como manchas de la edad y arrugas. Además, no olvides cubrir siempre que puedas tu cara con una gorra o sombrero.
- Exfoliación inteligente: exfoliar la piel una o dos veces por semana elimina las células muertas y estimula la regeneración celular, pero no exageres. Una exfoliación excesiva puede dañar la barrera protectora de la piel.
- Dieta e hidratación: tu piel es el espejo del alma así como también de lo que comes y bebes. Mantén una dieta equilibrada con alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales. Bebe suficiente agua para mantener tu piel hidratada desde adentro.
- Descanso y reducción del estrés: el sueño reparador y la gestión del estrés son esenciales para una piel saludable. Duerme lo suficiente y encuentra formas de reducir el estrés, como el ejercicio, la meditación o la práctica de hobbies.
Limpieza facial profesional
La limpieza facial es el proceso de cuidado de la piel que implica la eliminación de suciedad, aceite, células muertas y otros residuos que se acumulan en la piel del rostro.
Esta práctica es importante para mantener una piel saludable, prevenir problemas como el acné y mejorar la apariencia general de la piel.
Como podrás imaginar por lo que hemos ido viendo en los puntos anteriores, cada piel es distinta y necesita unos cuidados distintos adaptados a las necesidades individuales de cada persona.
En Estética Cruz Merinero nos hemos especializado en higienes faciales, para las que utilizamos cosméticos estéticos y limpiadores tratantes que permiten una limpieza completa y una regeneración del film hidro-lipídico.
La marca de ácidos que usamos trabaja con ingredientes que proporcionan una revitalización profunda, renovación celular y una tonificación dérmica que genera una barrera adecuada en la piel.
La misión que tenemos en nuestro centro de estética y antiaging es abordar, preservar y reequilibrar la renovación celular epidérmica.
Siguiendo estos consejos, tu piel facial te recompensará con un brillo natural, una textura suave y una apariencia joven y radiante. Pídenos un diagnóstico gratuito personalizado y prepararemos la limpieza que mejor se adapte a ti.
Si tienes alguna preocupación sobre tu piel, es recomendable consultar a un dermatólogo antes de realizar cualquier tratamiento nuevo o modificar tu rutina de cuidado facial.
¡Y prepárate para lucir tu mejor cara!